En el Evangelio que la Iglesia nos presenta el día de hoy se narra la parábola de los talentos (Mateo 25, 14-30). Pero, como el Diácono Richie explica más adelante, nuestra parroquia está en Puerto Rico y hoy celebramos la Fiesta de nuestra Patrona Nacional, Nuestra Señora Madre de la Divina Providencia. En adición, hoy también celebramos la Fiesta de nuestra Patrona Parroquial, María Madre de la Misericordia. Por esta razón, las lecturas de hoy se cambian para esta doble celebración mariana. Les invitamos a leer la reflexión que el Diácono Richie nos ha enviado, y en la próxima semana volveremos a las lecturas regulares de la Iglesia Universal para celebrar la Solemnidad de Jesucristo, Rey del Universo. DLB!

Hoy tenemos doble celebración. Por un lado, todos los puertorriqueños celebramos nuestra Patrona, Nuestra Señora Madre de la Divina Providencia. Por el otro lado, nuestra parroquia celebra también su Patrona, María Madre de la Misericordia. Así que hoy celebramos a Santa María, en ambas advocaciones.
Las lecturas cambian, para adecuarse a lo que celebramos. El Evangelio que proclamamos hoy es el de san Juan 2, 1-11, Las Bodas de Caná, hermosa lectura.
Vemos a María tomando un rol activo, cuando le dice a los sirvientes: «Haced lo que él diga.» Allí ocurre el primer milagro de Jesús. San Juan los llama signos. Esta es la primera vez que Él mostró su gloria y bien sabemos que esta manifestación marca el comienzo de su obra. Lo explica así: «… Jesús comenzó sus signos, manifestó su gloria, y creció la fe de sus discípulos en él.»
Me llama la atención las palabras de María. Ella quiere enseñarnos a querer lo que Jesús quiere, y a buscar hacer en todo su voluntad. Ella le pide a Jesús que transforme nuestras vidas en un banquete.
María se dedicó a hacer lo que Jesús quería, sin importar si entendía o no. ¿Quién más que Ella para enseñarnos a seguir a Jesús y a obedecerlo en todo?
María, como toda madre, quiere lo mejor para sus hijos. Todos, en el fondo, necesitamos escuchar a María decirnos al oído con ternura: «Haced lo que Él diga.»
María le pide a Jesús que transforme nuestras vidas en un banquete. Que hoy podamos experimentar el amor de nuestra buena Madre y su dulce voz. Gracias María por enseñarnos el camino.
¡Adelante con fe!
Diácono Richie
Tienes algo que decir
Te invitamos a comentar, aportar, sugerir, elogiar, objetar, refutar... sobre los temas y artículos que aquí presentamos.