En el Evangelio de hoy (Mateo 10, 26-33), Jesús nos pide que no temamos, sin importar la situación, ni la condición, ni el adversario… si Él está con nosotros, no hay nada que temer.
«Y si uno me niega ante los hombres, yo también lo negaré ante mi Padre del cielo» (Mt 26, 33).
Palabras fuertes del Señor hoy en el Evangelio. ¿Será que el Señor me va a dar la espalda? ¿Dónde queda la Misericordia?
Indudablemente el Señor es Misericordioso, pero también es Justo. En el Evangelio de hoy, en tan sólo ocho versículos, el Señor dice cuatro veces: “No tengas miedo”. Más claro no canta un gallo, como dicen en mi pueblo.
También ha dicho el Señor: «No he venido a condenar al mundo, sino a que el mundo se salve» (Jn 3, 17). Cuidado. Esto no quiere decir que nos quedemos cruzados de brazos.
Miremos la figura de Pedro. Lo negó, pero el Señor le abrió las puertas: “¿Me amas?” Miremos ahora a Tomás, no creyó, y el Señor le dijo: “Deja de negar y cree”. Cuántos otros casos hay en los Evangelios en que el Señor le da una nueva oportunidad: “Tus pecados son perdonados”; “Coge tu camilla y anda”; “Vete y no peques más”.
El Señor quiere hoy darte una nueva oportunidad. Te dice: “No tengas miedo”. No una, sino cuatro veces. “No tengas miedo”.
Confía y déjate abrazar, déjate tocar, déjate inundar por Jesús. Él te ama con locura y te quiere cerquita de Él. Pues acércate y dile como en el Salmo: «Que me escuche tu gran bondad, Señor» (Sal 68).
¡Adelante con fe!
Diácono Richie
Comentarios
Waooo, mi Señor, instruyendo cada día para que nuestro miedo se valla, en ves de tener miedo, tengamos temor de DIOS
AMÉN
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