San Valentín, patrón de los enamorados

Cuenta una antiquísima tradición que a finales del siglo III existía un edicto del emperador Claudio II, conocido como “El Godo”, que prohibía a los soldados profesionales contraer matrimonio, pues consideraba que esto era incompatible con la carrera militar… a pesar de esto, había un sacerdote que desafiando la orden del emperador, celebraba a escondidas el sacramento a las jóvenes parejas… según la leyenda, el sacerdote fue torturado y decapitado el 14 de febrero de 269dC… su nombre era Valentín…

Otra leyenda que se remonta a esa época habla del Obispo de Interamna (hoy Terni)… reconocido por su incansable esfuerzo en la evangelización, así como por los milagros y curaciones que realizaba… cuentan que el emperador quiso conocerle, así que le mandó a llamar… entrevista que el Obispo aprovechó para interceder por la Iglesia, que era cruelmente perseguida por el Imperio Romano… las palabras del Obispo fueron fuertemente criticadas por el gobernador Calpurnio… y el emperador se vio forzado a ordenar que se le arrestara y juzgara… el interrogatorio estuvo a cargo de Asterius, quien intentando ridiculizarlo le retó a sanar a su hija Julia, ciega de nacimiento… el Obispo hizo una oración por la niña y ésta recobró la vista inmediatamente… a pesar de la conversión de Asterius y su familia, el Obispo fue martirizado y decapitado el 14 de febrero… su restos mortales se conservan en la Catedral de Terni… y su nombre era Valentín…

Es muy poco lo que conocemos de estos dos personajes… y ese poco nos llega a través de actas apócrifas… por lo que es difícil separar lo que es historia de lo que es leyenda… pero es muy posible que se trate de un mismo santo que fue llevado desde Iteramna a Roma para su martirio… pues ambos comparten el mismo nombre y fueron decapitados en la Vía Flaminia un 14 de febrero…

Lo que sí sabemos es que el celo de San Valentín por defender el Sacramento del Matrimonio ha inspirado a las parejas de enamorados por siglos… y su muerte, entregando su vida al martirio por Jesucristo, es la expresión más sublime y plena del amor humano…

Mañana celebramos el Día de los Enamorados… le pido a Dios, que por intercesión de San Valentín, bendiga sus matrimonios… renovando en ustedes las gracias de este sacramento… y convirtiéndoles en reflejo vivo del Amor inmenso de Cristo por su Iglesia… Amén.